Todd y yo esperamos que hayan tenido unas vacaciones tranquilas. Estuve de visita con la familia de mi esposo en la Ciudad de México, y la pregunta de todos era: «¿Qué va a pasar con las deportaciones masivas y Trump?».
La primera presidenta de México, Claudia Sheinbaum, se ha estado preparando para recibir a miles de ciudadanos deportados. Funcionarios mexicanos están probando una aplicación para celulares que los mexicanos en Estados Unidos pueden usar para alertar a empleados consulares y familiares de que van a ser deportados, y el gobernador de Baja California anunció que el estado está habilitando 25 albergues para recibir a ciudadanos mexicanos deportados.
Después de haber informado sobre la primera administración Trump, creo que el presidente entrante tratará de hacer la mayor parte de lo que dijo que haría en la campaña electoral. Parte de ello se verá obstaculizado por desafíos legales y de financiación, pero esta vez habrá menos barandillas judiciales y del Congreso para protegernos a nosotros o al medio ambiente de los peores impulsos de la administración. Al trazar el mapa de lo que Trump y el Proyecto 2025 han planeado sobre políticas fronterizas y de inmigración, me resultó útil leer un análisis de Laura Bingham, profesora de Derecho en la Universidad de Temple y directora ejecutiva del Instituto de Derecho, Innovación y Tecnología. Bingham me dio amablemente permiso para compartir su análisis con nuestros lectores, que pueden encontrar aquí.
Los multimillonarios redoblan su apuesta por militarizar el espacio de la información
El multimillonario Elon Musk, propietario de la plataforma X, abogó recientemente por que un partido político de tendencia nazi ganara las elecciones en Alemania y, la semana pasada, escribió que Estados Unidos debería «liberar al pueblo de Gran Bretaña de su gobierno tiránico».
El hombre más rico del mundo, y asesor de Trump, no debe dormir nunca, está tan ocupado troleando el globo, difundiendo desinformación y amenazando a varios cargos electos de países democráticos. A medida que se desarrolla 2025, el truco será no quedar atrapado en el drama sin fin y la realidad alternativa de la administración. En The Border Chronicle planeamos documentar el impacto de las políticas de Trump, exponer a aquellos que se benefician de ellas (Musk y compañía) y cómo, y lo que estas políticas significarán para nuestra maltrecha democracia.
Uno de los principales ministros de propaganda de Trump, Steve Bannon, dijo una vez: «La verdadera oposición son los medios de comunicación. Y la forma de lidiar con ellos es inundar la zona de mierda».
Tristemente, esta estrategia funciona muy bien. En la era de la bazofia de la inteligencia artificial, los medios de comunicación de baba rosa (sí, esto existe) y los estafadores influenciadores de las redes sociales, la gente está optando por alejarse por completo de las noticias. No puedo culparles.
Multimillonarios como Musk y Mark Zuckerberg controlan ahora el espacio informativo a través de las redes sociales. Están enterrando las noticias basadas en hechos mientras sus algoritmos favorecen el contenido extremista con sabor a conspiración que permite a líderes autoritarios como Trump.
Al mismo tiempo, el colapso del periodismo legítimo -es decir, de los medios de comunicación que, entre otras cosas, comprueban los hechos, revelan claramente sus fuentes y corrigen de forma transparente cuando publican algo incorrecto- es casi total. Para agravar aún más esta crisis, los multimillonarios propietarios de medios de comunicación tradicionales, como Los Angeles Times y The Washington Post, se han acercado cada vez más a Trump y han censurado a periodistas y caricaturistas críticos con sus políticas.
Una floreciente industria del caos fronterizo
Prepárense para una escalada de la retórica sobre la crisis fronteriza. ¿Dónde estarían Trump y el movimiento MAGA sin la frontera como su piñata favorita? Y es una piñata muy lucrativa. El año pasado, Todd escribió que el presupuesto total de aplicación de la ley de fronteras e inmigración para 2024 (CBP e ICE sumados) superó por primera vez los 30.000 millones de dólares (30.200 millones). Todd ha estado cubriendo el gasto en seguridad fronteriza desde 2012. «Desde la década de 1980», escribió, “los presupuestos de aplicación de la ley han aumentado año tras año, independientemente del partido y el presidente”.
Es de esperar que Trump supere el gasto récord de Biden. Solo las deportaciones masivas se estiman en 315.000 millones de dólares o más. Musk, Peter Thiel y otros multimillonarios de Silicon Valley ya están haciendo cola en el comedero. El periodista especializado en tecnología Taylor Lorenz publicó este artículo en diciembre, en el que señalaba que Musk, Thiel y otros harán una oferta por los miles de millones destinados a defensa y seguridad para construir armas de inteligencia artificial, vigilancia y otras herramientas distópicas. También estaremos atentos a la petición de Musk de establecer su base SpaceX, justo al norte de la ciudad fronteriza texana de Brownsville, como una ciudad oficial llamada Starbase, Texas.
Mientras tanto, como hizo Trump durante su primera administración, los trabajadores humanitarios fronterizos serán pintados como criminales y perseguidos, al igual que los periodistas, las personas que emigran y cualquier funcionario electo que se niegue a llevar a cabo deportaciones masivas y critique abiertamente las políticas de la administración. Las milicias civiles envalentonadas por Trump ya han comenzado a intensificar las amenazas y el acoso contra los refugios de inmigrantes y los trabajadores humanitarios.
Empeoramiento de los problemas del agua
Mientras Trump y sus aliados están sembrando el miedo sobre las personas que buscan protección en nuestra frontera sur, en lo que deberían centrarse es en la supervivencia del Río Grande/Río Bravo. En mínimos históricos y asfixiado con kilómetros de alambre de púas en Texas, uno de los 10 ríos más amenazados del mundo es una bomba de relojería tanto para México como para Estados Unidos. Con el cambio climático y el río sobreasignado a la agricultura y la industria, la escasez de agua ya ha provocado disturbios en México y muertes. Todd, que está trabajando en un libro sobre el cambio climático y el río Grande, escribió en diciembre un conmovedor artículo sobre las comunidades que dependen de esta agua y lo que está en juego mientras las autoridades estadounidenses y mexicanas siguen dando largas al asunto.
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