Al entrevistar y hablar con varios migrantes haitianos, las historias que me contaron repetidamente y que me llamaron la atención fueron las de su viaje a través de 12 países para llegar a la frontera entre Estados Unidos y México. Debido a las restricciones de visa, los migrantes haitianos solo pueden viajar a Chile y Brasil, desde allí toman buses a través de Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia. Si tienen poco dinero, ocasionalmente caminan
En Colombia, los migrantes haitianos se dirigen a Necoclí Colombia, allí abordan botes de madera con destino a Acandí Colombia. En Acandí inician su viaje a través del Brecha de Darién hacia Panamá. En la Brecha de Darién muchos han muerto. Una entrevista con un migrante reveló la incapacidad de ayudar a un amigo a terminar el viaje a través de la brecha, lo que los obligó a dejarlos atrás.
Algunas historias hablaban de un grupo de hombres que violaban a mujeres frente al grupo y su esposo, mientras que otras historias hablaban de robos a punta de pistola y de caminar sobre cadáveres en el camino.
Una vez en Panamá, la mayoría se sube a los autobuses para viajar a México a través de Costa Rica, Nicaragua, Honduras y Guatemala. En México, después de haber pasado por América del Sur y Central, comienzan su viaje hacia la frontera entre Estados Unidos y México. Al hablar con García, abogada de inmigración en Harlingen, Texas, mencionó que uno no puede ir al consulado estadounidense y pedir asilo porque es otro proceso largo. Por lo tanto, las personas se ven obligadas a huir de la frontera entre Estados Unidos y México.
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