Tijuana, Baja California, imagina 500 migrantes, y aumentando, de Colombia, Perú, países del Medio Oriente y Asia y otros esperando entre dos muros fronterizos que se construyeron para separar a Estados Unidos y México. Este improvisado lugar de detención al aire libre, los solicitantes de asilo sufren un trato degradante, cruel e inhumano. Dormir en el suelo mientras llueve y hace frío.
Los migrantes “no pueden abandonar la zona debido a los muros físicos que se interponen en su camino. Algunos de los que llegan sufren fuertes dolores, diarrea, dolores de cabeza, etc. Muchas personas están embarazadas, tienen hijos, no tienen zapatos, están embarrados de lodo, mojados y en pésimas condiciones”. (Declaración de Adriana Jasso, quien ha trabajado con AFSC durante 16 años).
“CBP está violando tratados internacionales sobre trato cruel, inhumano y degradante. Estados Unidos ha firmado y ratificado el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (ICCPR), un tratado internacional que reconoce los derechos humanos fundamentales. Según el Artículo VI de la Constitución de los EE. UU., los tratados son la “ley suprema del país” que rige las responsabilidades de cada parte del gobierno a nivel local, estatal y federal. Por lo tanto, CBP está obligado por el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos”. (Carta del 13 de mayo de 2023 de Ricky Garza, Consejero Legal de Política Fronteriza de la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur – Oficina de Cumplimiento de SBCC para Derechos Civiles y Libertades Civiles en Washington, DC)
Las violaciones adicionales incluyeron tener solo un baño portátil para cientos (400-500) de personas que permanecían en esta zona de aplicación sin limpiarlo y quedó inutilizable muy rápidamente. Según la declaración de Pedro Ríos (del American Friends Service Committee/San Diego): “Los migrantes informaron haber esperado hasta 7 días sin refugio, agua mínima y solo una barra de granola para comer. Me comuniqué con el enlace de la Patrulla Fronteriza sobre las condiciones, y poco después los agentes colocaron un recipiente de 5 galones de agua todas las mañanas, pero esto se terminaba rápidamente. Al mediodía no había agua disponible”.
Los migrantes cumplen con todo lo que se les pide. CBP ha implementado un sistema de seguimiento que utiliza pulseras codificadas por colores o etiquetadas como las que se usan para los conciertos. Se utiliza para identificar la llegada de las personas en función de la primera interacción del agente con ellas, que puede ser uno o dos días después de que lleguen al corredor. ¿Cuál es el uso real de esta actividad?
Los niños no merecen el horror de las lesiones por alambre de púas, el hambre, la lluvia y el frío o la inseguridad que les sucede y están incluidos en este largo viaje para encontrar seguridad junto a sus padres. Los migrantes están encontrando muchos cambios, especialmente con la finalización del Título 42, una política de la era Trump que continuó bajo la Administración Biden. El Título 42 finalmente terminó el 12 de mayo, que era una política relacionada con la salud pública debido a COVID que deportó de inmediato a cualquier persona que buscara ingresar a los EE. UU. Ahora las reglas han cambiado nuevamente, lo que ha causado confusión y caos.
La necesidad es grande, las comunidades alrededor están demostrando su compasión y desde que se han dado cuenta de la ubicación de los migrantes están proporcionando agua, pañales, sándwiches/comida, productos de higiene, etc. Los albergues a lo largo de la frontera, especialmente en Arizona, Texas y California están más allá de su capacidad. Carecen de todo lo que los humanos necesitan.
Algunos funcionarios estadounidenses no están aceptando la crisis humanitaria que esto ejemplifica, en cambio, el ejército y la guardia nacional se están desplegando supuestamente para mantener el orden. Estos son migrantes que huyen de la violencia, la pobreza y la corrupción en sus propios países; esperanzados de un trato más humano en EE.UU. No lo han encontrado en la frontera.
“Hay una forma correcta, una forma segura y una forma incorrecta, una forma ilegal, de ingresar a los Estados Unidos”, dijo un funcionario electo. “Aquellos que llegan a la frontera sin usar un camino legal se presume que no son elegibles para el asilo”. El Título 8, una política que estuvo vigente durante la administración de Obama (por la cual se deportó a 400,000) ahora está vigente y conlleva penas con una prohibición de entrada de 5 años, un segundo arresto puede resultar en prisión.
Una política relativamente nueva de usar la aplicación CBP ONE no parece estar funcionando según lo planeado y está causando frustración. Los delincuentes están haciendo promesas falsas y abusando de la tremenda esperanza que tienen los migrantes. Nunca hemos visto 24.000 agentes de la patrulla fronteriza junto con militares y guardias nacionales en la frontera. Según el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, el plan es abrir 100 centros regionales de procesamiento en países centroamericanos para que las personas no lleguen a la frontera sur de EE. UU. No se han dado fechas definitivas. Otros migrantes desesperados también se dirigen a la frontera en Canadá. Algunos han regresado a casa en una bolsa para cadáveres o desaparecidos. Es un viaje traicionero para encontrar un lugar seguro.
En una declaración de Lilian Serrano, (monitora de derechos humanos) puso un ejemplo de la falta de intervenciones de atención médica: “En otro incidente, me avisaron hoy a las 4:15 pm que una mujer de Somali de 29 años embarazada había vomitó 5 veces hoy. Me comuniqué con el enlace de la Patrulla Fronteriza y me dijo que debería haber llamado al 9-1-1. Luego dijo que los llamaría. Han pasado varias horas y nadie ha llegado para ayudar a la mujer embarazada. La estamos vigilando de cerca y esperamos que reciba ayuda pronto”.
Los medios lo llaman Crisis de Cruce Fronterizo mientras ignoran que existe un derecho internacional a migrar que está siendo violado. Personas de todo el mundo están en movimiento para encontrar un lugar seguro para criar a su familia. Oramos para que se encuentre una solución humanitaria para evitar tragedias, muertes, detenciones y separación de familias. Los migrantes continúan con su determinación y esperanza. Como declaró Pedro Ríos, “no hay duda de que los migrantes en el corredor están bajo custodia de la Patrulla Fronteriza. Como tales, deben ser tratados con dignidad y decencia de conformidad con las normas de derechos humanos. Eso no es lo que está pasando”.
(Nota: los migrantes en este lugar han sido trasladados mientras que, al mismo tiempo, la comunidad del desierto alto de Jacumba Hot Springs ahora está experimentando la llegada de cientos de migrantes. Ayude a los migrantes a medida que llegan a sus ciudades. Al mismo tiempo, abogue por una legislación migratoria integral que acoja a los migrantes con humanidad y trate a aquellos que han estado aquí durante años para que tengan acceso a un camino hacia la ciudadanía).
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